Las memorias de Kingston han sido diseñadas, fabricadas y rigurosamente probadas para satisfacer las especificaciones exactas de cada sistema de una marca específica. Su compatibilidad y soporte técnico quedan respaldados a través de una garantía de por vida y la reconocida fiabilidad de Kingston.

Kingston invierte millones en el desarrollo y prueba de sus módulos hoy para reducir su costo total de propiedad mañana. El rendimiento, la estabilidad y la confiabilidad a largo plazo resultantes son algunas de las razones por las que la memoria de servidor de Kingston se ha convertido en un estándar mundial de la industria. Con más de un cuarto de siglo de experiencia en memorias para servidores y como líder de la industria, Kingston tiene el conocimiento y los recursos para respaldar sus necesidades de memoria para servidores.

Durante más de tres décadas, Kingston ha sido la marca de memoria que los clientes eligen para potenciar sus centros de datos. La memoria Server Premier cuenta con una lista de materiales (BOM) bloqueada para garantizar una marca y una revisión uniformes de la DRAM y se somete a pruebas de quemado dinámicas y rigurosas diseñadas para eliminar fallas tempranas en la fábrica antes de enviarse. Un componente clave del proceso de prueba de producción es que Kingston simula las cargas de trabajo de los clientes en las mismas placas base que se encuentran en sus centros de datos.

Las pruebas son la piedra angular del compromiso de Kingston de ofrecer la memoria más confiable que pueda comprar. Además del conjunto completo de pruebas que Kingston Technology realiza en su memoria, cada módulo de servidor de Kingston debe pasar las Pruebas dinámicas de quemado. Es un proceso único diseñado para descartar módulos potencialmente defectuosos antes de enviarlos.

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